Nuestro primer día en Nueva York, tras horas de vuelo, aduanas y kilómetros de caminatas, lo terminamos en Brooklyn, jugueteando con la fotografía nocturna, con resultados en general mediocres, salvo honrosas y satisfactorias excepciones. Mientras volvíamos agotados al hotel, cruzando a pie el puente de Manhattan, nos encontramos con un curioso símbolo pintado a espray en el suelo:
"Coloca los pies, apunta y haz clic. #NoFotosDeMierda". Evidentemente, ante tal sugerencia lo primero que hicimos fue seguir las instrucciones al pie de la letra, pero como era de noche y no teníamos trípode ni muchas ganas de otra cosa que no fuera dormir, el resultado acabó siendo un fondo negro salpicado de puntos de luz totalmente indeterminados. En resumen, una de tantas "fotos de mierda" que no reproduciré aquí.